martes, 24 de julio de 2007

NOTICIAS (anti)



24/7/2007


¿INMADUREZ POLÍTICA O VISIÓN DE FUTURO ?

Parece ser que los españoles somos partidarios de la anti-globalización. En consecuencia, somos uno de los países menos partidarios de la internacionalización. Este es el resultado de unos sondeos de opinión de una empresa nortemericana (Harris) en colaboración con el periódico Financial Times.

Pero no conformes con esto, también destacamos en ser anti-libre mercado. Parece ser que destacamos en un irrefrenable deseo de intervencionismo. O sea, más intervención de la política en la economía. Por eso disgusta más un liberal (a buena parte de la población) que un tipo como Chaves, aunque no gusten demasiado sus salidas de tono. ¿O sí?


Pero hay más, también deseamos que los impuestos sean más progresivos. Con otras palabras, que se jodan los ricos. ¡A repartir! Como corresponde a la gente buena de verdad, somos fervientes partidarios de las medidas redistributivas. ¡Cuantas más mejor! Por eso no cae tan mal Fidel Castro. E incluso muy bien. Recordemos que la venerable Directora de la Biblioteca Nacional, la señora Regás, ha expresado, públicamente, su admiración por el dictador cubano. ¡Éste sí que interviene!

No queda aquí la cosa. Estamos entre los más anti-nucleares. Queremos energías limpias y no contaminantes. Imagino que también las desean baratas. ¡Toma, y yo! ¡Y jamón de jabugo! El problema es que incluso naciones 'verdes', como Finlandia, han aprobado (en el Parlamento) un plan para la construcción de plantas nucleares. Pero no son tan buenos como nosotros. Nosotros somos más limpios y anti-contaminantes. Más puros. ¡Cuánto tienen que aprender de nosotros!


Hay otra cosa muy interesante. Somos el país europeo más anti-norteamericano. O sea, más anti-USA. De ahí que nuestro amado Presidente Rodriguez no se levantara al paso de la bandera norteamericana, cuando era jefe de la oposición. Una ciudadanía madura no habría perdonado esta grosería-estupidez. ¡Pero aquí tenemos un par! ¡Desafiamos e insultamos al pais más poderoso del mundo! ¡Olé! ¡Viva el talante y la inteligencia!

De verdad que deseo equivocarme, pero pienso que una buena parte de la población española vive en la nube del 'buenismo' y de la pulsión progre. O sea, somos uno de los países más inmaduros de Europa, politicamente hablando. Tiene sentido que nuestro Presidente sea Rodriguez Zapatero. Está a la altura de buena parte de la ciudadanía.


Mi hipótesis, que espero que sea errónea, es que tendremos que caer más abajo, hundirnos más, para poder reaccionar. De todos modos y salvando las distancias, algo parecido ha sucedido en Francia y en Inglaterra.

En Francia, la economía tuvo que estar para el arrastre para que el 85% de los franceses fueran a las urnas y le dieran el voto de confianza a Sarkozy para cambiar el rumbo. Ya no se creyeron a la socialista Segal. Incluso su asesor económico en campaña, Besson, la abandonó antes de terminar la misma. La socialista había ofrecido tantas mejoras sociales, que le pareció (al economista) un auténtico disparate. Porque resulta que los gastos hay que pagarlos. ¿Solución? ¡Redistribución! ¡Más impuestos progresivos! Como gusta a los ciudadanos, digamos, españoles. Progresistas, eso sí. Aunque la economía se vaya al carajo. Y una vez en el carajo, más intervencionismo. Y más carajo.



Inglaterra estaba con muy deficientes funcionamientos en los servicios sociales y con una economía nada boyante, por ser suave. Encima, los sindicatos (especialmente los mineros) habían echado un pulso al Estado. La gente había votado a la 'dama de hierro'. No se amilanó. El rojerío europeo profetizó grandes catástrofes a Inglaterra por haber elegido a esta 'bestia liberal'. El rojerío se equivocó, una vez más. Pero no aprenden.


No podía faltar una referencia a la paz. Nuestro amado Presidente y buena parte de la ciudadanía quiere la paz. El resto (los no progres) somos una cuadrilla de malvados sin entrañas que queremos guerra, muerte y destrucción. Más aún, la 'buena gente' (es decir, Rodriguez y sus muchachos) está por la Alianza de Civilizaciones. Pero el resto (los malvados) tenemos muchísimas dudas y peros. No nos gusta el 'buenismo' y el 'gilipollismo'. Por ejemplo, Irán acaba de ejecutar a 16 personas por delitos de homosexualidad y adulterio.

Entonces, aparte de sonreir ¿qué significa estar a favor de la Alianza de Civilizaciones? ¿Decirles que estas cosas no se hacen? ¿No decir nada? ¿Decir que nosotros somos peores y que no se preocupen?


De momento, un Consejero, el sr. Lladó, le dice al Jefe del Estado que se marche de Mallorca y que no vuelva. ¡Y no pasa nada! Encima la sra. Armengol, socialista, dice que se lleva muy bien con el grupo independentista del sr. Lladó. ¡Claro! ¡Necesita su voto para seguir con el jamón y el coche oficial! ¿O será por la revolución pendiente?



Sebastián Urbina.


PD. Espero que nadie se escandalice por haber utilizado la palabra 'carajo'. Se han hecho exposiciones fotográficas en Extremadura (financiadas por los socialistas) con Cristo en pelota picada y la Virgen peinándose el felpudo. ¡Y no passsssa nada, tío!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ser progre es una actitud muy respetable siempre y cuando no suponga tocar los huevos al prójimo.

Me explico:

En una sociedad abierta los progres tienen libertad para organizarse entre ellos del modo que más oportuno consideren. Pueden vivir en comunas, en falansterios, en koljoses ... pero no tienen derecho a obligar al prójimo a adoptar esos modelos de organización social.

En una sociedad abierta los progres tienen libertad para educar a sus hijos de forma "comprehensiva", para confiar su educación a pedagogos, por llamarlos de algún modo, que compartan su cosmovisión, y de tenerles jugando con plastilina y cantando canciones de "germanor" hasta que les salgan pelillos en el escroto y puedan dedicarse a fumar porros y a fornicar entre ellos y con animales si les apetece. Pero no tienen derecho a imponer ese modelo educativo a los padres que queremos que en el colegio instruyan a nuestros vástagoa a la antigua usanza.

En una sociedad abierta los progres tienen libertad para disponer libremente de los frutos de su trabajo, si es que saben qué significa este concepto. Pueden dedicar el porcentaje de sus ingresos que quieran para financiar oenegés, para pagar el sueldo de mediadores interculturales, para subvencionar a titiriteros o para recompensar a los inmigrantes que entren a vivir a sus casas. Pero no tienen derecho a disponer de los recursos de los que no piensan como ellos, y que con toda legitimidad moral, creen que su riqueza sería mejor empleada de otros modos y que no han de dar explicaciones por ello.

En resumen, se trata de un problema de libertad y de responsabilidad. Si quieren ser progres, que lo sean, pero que asuman ellos y sólo ellos los costes y las responsabilidades que ello comporta y que no obliguen a los demás a asumir los costes y las responsabilidades de una cosmovisión que a muchos nos repugna.

Anónimo dijo...

Así debería ser.

Lo malo es que esos progres han accedido al poder, ¡Y así nos va!

A ver cuando conseguimos echarlos y mandarlos a su comuna, a que entre ellos disfruten de su mutua compañía.