domingo, 7 de septiembre de 2008

EL PROGRESO QUE NO CESA.


7/9/2008.



En este primer disparate de comienzo de curso, me ha parecido conveniente recapitular dónde estamos y cuáles son nuestras perspectivas, al objeto de empezar con una visión de conjunto sobre lo que está pasando.

Y lo primero que debo señalar, es que la valoración más precisa de la actuación económica del gobierno Zapatero, ha sido magistralmente resumida por el profesor Velarde, maestro de varias generaciones de economistas: en la época de vacas gordas – afirma - se hizo todo lo posible para que llegaran las vacas flacas, algo rigurosamente exacto. Durante toda la legislatura no se hizo nada en absoluto, los desequilibrios fundamentales crecieron exponencialmente y ni una sola reforma estructural fue acometida. Nuestra economía no se ha adaptado en absoluto a la globalización, y hemos perdido ya un 30% de cuota de mercado exterior.

A principios de 2007, la economía había alcanzado su punto de inflexión, y el endeudamiento y el déficit exterior eran insostenibles. Pero como el pesimismo no crea puestos de trabajo, Solbes y el Banco de España no hicieron nada, excepto engañar a los ciudadanos.

En agosto, la crisis financiera aceleraría la caída. La respuesta de Solbes y el Banco de España fue sencillamente demencial, “la crisis no nos afecta” y “tenemos el sector financiero más sólido del mundo”. ¿Cómo estos insensatos pudieron llegar a afirmar que una crisis financiera internacional no iba a afectar al país más endeudado del planeta?, y respecto a la supuesta solidez, un sistema que ha concedido masivamente préstamos sin sentido a largo plazo, avalados por activos que no cubren ni la mitad de lo debido, y financiado con préstamos obtenidos a corto plazo, es una mega insensatez que habría llevado a la quiebra a más de la mitad del sector, de no ser por la ayuda masiva del BCE – 46.000 millones de euros mes en los últimos doce - mas del doble, en relación al tamaño, de la recibida por el sector financiero norteamericano de la Reserva Federal.

Que el sistema tuviera reservas específicas de unos 30.000 millones, era el chocolate del loro, pues solo servirán para cubrir por unos meses la morosidad de las familias, pero no hay ni para empezar con la “subprime” española, la deuda de promotores, que asciende a 300.000 millones, y donde nadie puede devolver un céntimo. De todas formas el mayor problema a corto del sistema financiero son los vencimientos, pues debe casi 900.000 millones de euros al exterior, excluido el BCE, que no tiene más narices que refinanciar, si no quiere darle un golpe muy serio al euro.

Hasta hace cuatro meses, el Banco de España y el gobierno afirmaban que las cuentas 2008 se cerrarían con un superávit cercano al 1%, algo que ya entonces era realmente obsceno. De momento, y falta lo peor, el déficit del Estado del primer semestre es ya del 1%, y en ayuntamientos y CCAA la situación es dramática, y ello a pesar del fuerte incremento de la presión fiscal derivada del aumento de la inflación, IVA e IRPF, lo que augura la próxima subida de numerosos impuestos. Es una irresponsabilidad absoluta que Solbes, que carece ya de recursos para financiar el correcto funcionamiento de las instituciones del estado, prometa a estos un dinero que ni tiene ni tendrá.

El paro, por su parte, está creciendo exponencialmente, y el porcentaje de jóvenes parados, 24,8%, es el mayor de toda la eurozona. Por primera vez en casi 50 años, los españoles vuelven a emigrar a Europa -vendimia, manzana, etc- para poder sobrevivir.

Finalmente, la gran estafa a la clase trabajadora, es el supuesto sesgo social de la política económica del gobierno. Aparte la distribución medieval de la renta creada, España es el único país de Europa donde ha disminuido el “esfuerzo social”, es decir, el gasto social como parte del PIB, del 14,4% en 2003 al 14% en 2007, y con un deterioro impresionante de la sanidad, la educación y los servicios sociales esenciales. Y como guinda del pastel, aunque esto afecta esencialmente a la clase media, la Seguridad Social está quebrada.


En definitiva, nuestra economía presenta una dinámica y un patrón de crisis completamente nuevos, estructural y de larga duración. Por ello, en lugar de preguntarse cuándo se producirá una imposible recuperación, lo pertinente es justo lo contrario, ¿hasta dónde llegará el derrumbe?, y ¿cuáles serán los siguientes sectores en caer?, la mitad del financiero, la seguridad social y las cuentas públicas, son tres apuestas seguras, pero además, y al contrario de lo sucedido en otras crisis, donde era el Estado quien estaba en bancarrota, en esta son las familias y las empresas, por lo que el hundimiento del consumo y el incremento vertical del paro van a ser las grandes señas de identidad en todo un futuro previsible. (Roberto Centeno, catedrático de economía)


No haga caso de estos fachas-antipatriotas. ¡Vote ZP!. Son progresistas. ¡Qué más quiere! Dentro de nada podrá usted abortar todas las semanas. Y hay más progreso en perspectiva.


Sebastián Urbina.

1 comentario:

Anónimo dijo...

A estos progresistas que nos gobiernan no se les ocurriría jamás, intervenir sociedades hipotecarias con problemas, como en USA. Solo les interesa las solventes.

FERNANDO SANTAYANA