 | | | | | | ¿VENGANZA? | | | | |  | | | | En UPyD están convencidos de que el "apagón" del CIS se debe a un ajuste de cuentas de su máxima responsable, Belén Barreiro. | | | | | | ARTÍCULOS RELACIONADOS | | | | | | | | | | |  | | | | | | | | | | | Rosa Díez no está dispuesta a dejar las cosas como están. En el seno de Unión, Progreso y Democracia ha dolido sobremanera que el CIS decida casualmente esta legislatura no preguntar a los ciudadanos por la opinión que les merecen los líderes de los partidos que no hayan llegado al 1% del censo electoral estatal.
Así las cosas, UPyD ha decidido enviar una carta a la directora del Centro de Investigaciones Sociológicas, Belén Barreiro, para mostrarle su malestar y pedirle explicaciones. Misiva cuyo conteniendo están ultimando sus máximos responsables y en la exigirán que le imputen no sólo el voto directo, sino también el voto de simpatía.
No faltan en el partido de Rosa Díez las voces que apuntan a que se trata de una venganza personal contra su líder. Al hilo del nombramiento de Barreiro, el pasado mes de mayo UPyD cuestionó su idoneidad para el cargo, puesto que no era funcionaria y ése era uno de los requisitos que se exigían para un máximo responsable del CIS. Eso unido a la animadversión que los socialistas sienten por su ex compañera. "Los directores generales deben ser funcionarios de carrera, según establece el art. 18.2 de la Ley 6/1997, de 14 de abril, de Organización y Funcionamiento de la Administración General del Estado", recordaba Díez en la pregunta que presentó entonces en el Congreso para que el Gobierno respondiera por escrito.
Incluso el Partido Popular ha salido en defensa de Díez por lo que en UPyD consideran una "cacicada". La portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que el CIS parece haberse convertido en "la casa de las encuestas de algunos", y no de todos. |
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