viernes, 17 de junio de 2011

ZAPATERO Y LAS VÍCTIMAS










Difícilmente se podían reunir en tres párrafos tantas verdades, y todavía más complicado resulta expresarlas con tanta dureza, pero la carta que Rubén Múgica ha mandado a Zapatero es un contundente alegato que resume a la perfección el sentimiento de todas las víctimas ante el victorioso desembarco de Bildu en las instituciones.

Hijo del concejal socialista asesinado por ETA Fernando Múgica y sobrino del que fuera ministro de Justicia y Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, Rubén le dice directamente al presidente del Gobierno que "no se puede ofender más a las víctimas del terrorismo" y que la ley "ha sido doblegada para beneficio de los criminales".

"Sólo pedíamos justicia", asegura, "pero el estado nos ha dado la espalda", se lamenta. Lo peor, que "ha sido en nombre de la paz, invocada hasta el manoseo por necios y tramposos". Una invocación carente de sentido, ya que "aquí no hay ninguna guerra, y sí persecución y discriminación totalitarias".

Para terminar, Múgica se dirige directamente al presidente y le recuerda su enorme parte de culpa en lo ocurrido: "El principal responsable eres tú, y no habrá días en el calendario para perdonar lo que has hecho". (ld)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Múgica ha encontrado palabras para expresar su indignación, yo no las encuentro... me siento tan abatida, indignada, cabreada, harta, furiosa...me valen todas las palabras pero no me basta ninguna, no encuentro la que definiría mi estado de ánimo con la suficiente exactitud.

Nunca he tenido ganas de matar a nadie, pero ahora sueño con esas películas en las que a los traidores se les mata en la horca, y veo, en mis sueños, seis cuerpos balanceándose de una viga en el Salón de Plenos del Tribunal Constitucional, otros dos en la Moncloa, y otros muchos en el Congreso...

.... lo que son los sueños.... pero claro, lo sueños, sueños son.

Y fuera de los sueños, en la realidad, solo puedo decir: Sr Múgica! Estoy con usted, y si hay que salir a la calle ahí me encontrará. Yo también estoy indignada, pero a diferencia de los de Sol, YO SI TENGO RAZÓN... lamentablemente