jueves, 4 de agosto de 2011

ZAPATERO ¿A LA CÁRCEL?

 
 
 
 
 
 
PRENSA ECONÓMICA

Zapatero, ¿a la cárcel?

El Gobierno húngaro quiere condenar a los primeros ministros que dispararon su deuda pública: ¿se imaginan que pasara lo mismo en España?


Este jueves la prensa económica española es como un relato de misterio: llena de preguntas sin respuesta, pistas falsas, interrogantes, malos que se quieren hacer pasar por buenos e inocentes a los que quieren cargar con el muerto. Debe ser por eso que dicen acerca de que el verano es una buena época para la novela negra.

A Elena Salgado le toca el papel de sospechosa que intenta escurrir el bulto, por lo que pudiera pasar. Quizás por eso, Expansión titula "Salgado culpa a EEUU de los ataques a España". No sólo el país americano se lleva la reprimenda de la vicepresidenta económica, que también señala a la UE porque el Eurogrupo "no consiguió resolver la tensión existente en los mercados de deuda. Incluso agosto se lleva lo suyo, por ser un mes de "elevada volatilidad". Vamos, que sólo falta que la ministra salga cantando aquello de "pío, pío, que yo no he sido..."

El misterio lo ponen las posibles medidas que el Gobierno español podría estar dispuesto a aprobar para calmar la situación en los mercados de deuda. El Economista habla de un "plan B" del Gobierno que incluye algunas medidas que generarán auténtico terror entre los sufridos ciudadanos, como la subida de los impuestos que gravan los carburantes. Expansión, por su parte, alude a una agenda oculta que podría incluir una modificación en el Impuesto de Sociedades. Y aunque el Ejecutivo asegura que no subirá los tributos a las empresas tampoco es que su palabra aporte demasiada seguridad. Lo que seguro que sabemos, según destaca la portada de Cinco Días, es que no lo bajará, como se había insinuado en los últimos meses.

El que puede haberse quedado de una piedra leyendo este jueves El Economista es José Luis Rodríguez Zapatero. En la octava página del salmón blanco, aparece un destacado realmente curioso. Al parecer, la deuda pública de Hungría respecto al PIB creció del 53 al 80,1% durante los ocho años del Gobierno socialista.

Ahora, el nuevo Ejecutivo magiar está intentando cambiar la legislación para poder condenar a tres ex primeros ministros por su mala gestión. Cuando Rodríguez Zapatero llegó a La Moncloa, la tasa de paro estaba en el 11% (ahora es del 21%), el déficit era del 0,4% (9,2% en 2010) y la deuda no llegaba al 50% (se espera que supere el 80% este mismo año). ¿Tiene motivos para preocuparse el leonés? No nos lo imaginamos con un traje a rayas y una bola de plomo en el tobillo.

Eso sí, como nos pongamos así no va a haber sitio en las prisiones para los políticos europeos. Porque las dos imágenes más inquietantes del día en esta novela de terror en la que se ha convertido la economía mundial llegan desde fuera de las fronteras españolas. La primera nos la ofrece Expansión, que reúne los datos con la evolución de la prima de riesgo en Italia, España, Francia y Bélgica. De las dificultades de hispanos e italianos ya teníamos noticia. Pero que el virus esté extendiéndose a París y Bruselas no deja de ser preocupante. El perfil de los gráficos del salmón de Unidad Editorial es como el de las etapas de alta montaña del Tour de Francia que acaban en alto... en muy alto.

La segunda imagen del día es más triste que terrorífica. Es la fotografía que Cinco Días utiliza para ilustrar la noticia sobre la comparecencia ayer de Berlusconi en el Parlamento italiano. El primer ministro italiano aparece desafiante, algo avejentado (pese a sus retoques) y con gesto más serio que de costumbre. Pero el que da pena es su ministro de Economía, Giulio Tremonti que se lleva las manos a la cabeza y mira al suelo, entre compungido y preocupado, mientras su jefe habla. Según el diario de Prisa, "Berlusconi defiende la solidez de la economía y la banca italianas". Pues podía empezar por convencer a su ministro, porque viéndole la cara, cualquiera se fía. (Mercados)

2 comentarios:

ansiadalibertad dijo...

Yo sí me imagino TODOS LOS DÍAS a ZP y muchos más con un traje a rayas y una bola de plomo en el tobillo. También me los veo colgados, guillotinados y otras muchas ocurrencias

Sebastián Urbina dijo...

Carlos, que estamos en vacaciones...