martes, 14 de agosto de 2012

ENFERMOS DE IDENTIDAD



 





ENFERMOS DE IDENTIDAD


La vicepresidenta de la Generalidad de Cataluña, la democristiana Joana Ortega, sostiene que hay comunidades autónomas en España "que no tienen sentido" y que encima piden devolver competencias al Estado.

En una entrevista de Catalunya Ràdio recogida por Europa Press y ante una eventual recentralización de competencias, Joana Ortega ha sostenido que en la actualidad ya hay comunidades autónomas "que no tienen sentido y ellas mismas reivindican devolver competencias" al Estado.

Sin concretar nombres, Ortega parecía hacer alusión a comunidades gobernadas por el PP que, como la de Madrid, han planteado devolver competencias como la de Justicia.

La dirigente de Unió, el partido que encabeza Josep Antoni Duran i Lleida, ha contrastado estas comunidades con otras como Cataluña que reivindica su autogobierno, se lo cree y rechazará frontalmente cualquier intento de diluir el reconocimiento de su singularidad.

En cuanto al debate sobre la independencia de Cataluña, Ortega ha asegurado que ahora se debe "priorizar" el pacto fiscal, y que lo importante es centrarse en esta reivindicación e ir juntos en este mensaje, para evitar que una pluralidad de mensajes pueda diluirla.
"Debemos intentar no dividirnos como país, y cuanto más fuerte, más unánime sea el clamor, más fuerza tendrá", ha asegurado Ortega, para quien en Cataluña hay un sentimiento de rechazo y maltrato por parte del Gobierno. (LD).

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NACIONALISMOS. NO SOMOS IGUALES.

Decía Miguel de Unamuno: ‘Soy español, español de nacimiento, de educación, de cuerpo, de espíritu, de lengua y hasta de profesión y oficio». Así expresó Miguel de Unamuno su amor y pasión por España, de lo que dejó constancia en algunos de sus textos. Es el caso del artículo País, paisaje y paisanaje, publicado el 22 de agosto de 1933 en el periódico Ahora, e incluido, posteriormente, en el libro Paisajes del alma

Pero no todos los sentimientos son iguales.
Si el patriotismo español fuese, por ejemplo, como el de los nacionalismos periféricos, el sistema público de enseñanza, en toda España, sería exclusivamente en lengua española. Es lo que hacen los nacionalismos. Los padres castellanohablantes no pueden escolarizar a sus hijos en español. En Cataluña, solamente lo pueden hacer en catalán. Afortunadamente, ha habido cambios, recientemente, en Galicia y el País Vasco. De ahí que los nacionalismos periféricos sean, y así lo han demostrado repetidamente, excluyentes e intolerantes. Aunque nieguen los hechos. Por eso la mentira es una de sus especialidades. Pero ya es tarde. Mucha gente se ha enterado, aunque algunos no se atrevan a decirlo en público, por si acaso.

Saben lo que les pasa a los disidentes, como el famoso Albert Boadella, (y tantos otros) que tuvo que marcharse de Cataluña. Es la libertad del Oasis, y de los nacionalismos periféricos, en general.
En cambio, el patriotismo español, no sólo ha permitido sino que ha reconocido legalmente el uso del catalán, euskera, gallego. Con una profunda y amplia descentralización política, deslealmente utilizada por los nacionalistas. O sea, el patriotismo español es incluyente, no excluyente.

De esto se han aprovechado los nacionalismos periféricos para excluir el castellano, o español, de las instituciones. Este es su verdadero rostro, el desprecio por la libertad ajena. Con la patética colaboración de los socialistas y la acobardada genuflexión de los populares. Con las honrosas excepciones de rigor.

El ser humano, aunque haya contadísimas excepciones, no sólo tiene sentimientos hacia otros seres humanos o, incluso, animales no humanos. También tiene sentimientos hacia entes colectivos. Es inevitable tener emociones y sentimientos hacia la ‘patria’. Por ejemplo, yo no tengo ni puedo tener los mismos sentimientos hacia Madagascar (con todos mis respetos) que hacia Mallorca y hacia España. El problema no es éste.

El problema es si tales sentimientos, que son prácticamente inevitables, se sacralizan, junto a sentimientos de superioridad frente al ‘forastero’, el maketo, o el charnego. Es normal tener sentimientos positivos hacia la patria, pero es despreciable que en nombre de la misma se rechacen o minusvaloren las personas que no tienen los mismos sentimientos, o los mismos orígenes.

En resumen, los supuestos intereses del ente colectivo, la patria, no pueden estar por encima de los intereses de las personas de carne y hueso, si hubiere conflicto. Y esta barbaridad, la primacía de los supuestos intereses de la nación sacralizada, sucede con el fanatismo nacionalista. Del que catalanes, vascos y gallegos han dado lecciones, seminarios y masters. Por no hablar de la quema de banderas españolas, silbidos al himno nacional, quema de fotos del Rey y otras muchas ofensas que, en parte, se han exhibido en las televisiones periféricas, pagadas con los impuestos de todos los españoles.

Por cierto, las televisiones nacionales no han hecho lo mismo que ellos, lo que muestra, una vez más, las diferencias entre el patriotismo español y los nacionalismos periféricos. A tal efecto, recordemos el conocido, ‘me cago en la puta España’, en la TV3 catalana, vomitado por Rubianes y jocosamente comentado por el presentador, entre las risas periféricas del auditorio. No hubo excusas, por supuesto. Es más, la Ministra de la Guerra, la señora Carmen Chacón, se puso un suéter, en una manifestación ‘progresista’, que decía: ‘Todos somos Rubianes’. Todos los que son como ella, naturalmente.

Por no hablar de la absurda e injusta ley electoral que privilegia a los nacionalistas. Recordemos que en las pasadas elecciones, 300.000 votos le valieron al PNV para conseguir seis diputados. Pero 303.000 votos le valieron a UPyD para conseguir un solo diputado. ¿Cómo pagan estos privilegios feudales? Con chantajes, ofensas y victimismo.

A mí no me interesa que alguien tenga sentimientos positivos exclusivos hacia Cataluña, País Vasco o Galicia, y negativos hacia España. Es su problema. Lo que critico, y muestra la decadencia y corrupción de nuestra clase política y de nuestra democracia, es que tales sentimientos puedan conducir a privilegios y ventajas económicas o políticas, o ambas. Y que en nombre de estos sentimientos, se impida que los padres castellanohablantes (o los que quieran) puedan escolarizar a sus hijos en castellano o español. La lengua oficial del Estado.

Aunque no puedo evitar que me lean nacionalistas periféricos, no escribo para ellos. Escribo para los convencidos y para los dubitativos, para los que, todavía, no han aclarado si los nacionalistas periféricos tienen cuentas pendientes a su favor, que el resto de españoles debamos pagar. También escribo para los que se han creído la acusación nacional-periférica, de que ‘todos los nacionalismos son iguales’.

Este es el intento de blindar sus creencias nacionalistas. Si todos los nacionalismos son iguales, ningún españolista (supuestamente nacionalista) podría, legítimamente, criticar a un nacionalista periférico. Pero no somos iguales. Cree que ladrón que todos son de su condición. La mayoría de los españoles de hoy, somos patriotas. Si fuésemos nacionalistas, como ellos, ya se habrían enterado. Y lo pasarían mal.

Sebastián Urbina.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tanto despedir y lo que tendriamos que solucionar es como este tipo de personajes como la Sra. Ortega tiene negocios con su familia como elsfillsdelajoana.net, donde trabajan y han trabajado durante años personal sin papeles y sin contratos de ningún tipo, incluso obligando a los trabajadores a pagar la seguridad social si querían tener un contrato de ocho horas para que pudieran pedir los papeles. Negocios sucios donde se lucran estas personas a consta de la necesidad de los demás, con negocios como los restaurantes de barcelona: Lolita, el Blau, el Támara, don pablo y el Canela. A veces han tenido algún problema con alguno que se ha querido ir de la lengua y lo han solucionado callado la boca con cifras de 6000 euros, salvándose de pagar multas, y pudiendo continuar con los negocios fraudulentos.
Y qué casualidad que nunca han tenido problemas con inspecciones de ningún tipo de la generalitat. Y os lo dice una fuente muy cercana que ha trabajado para ellos, explotadores y mediocres que si no fuera por estas ventajas hace tiempo se les hubiera acabado el negocio. No contratos, noches extra de unas 5 horas a 40 euros en "mano", robando días festivos a los trabajadores. Explotadores!!