domingo, 25 de enero de 2015

ODIO ANTIESPAÑOL DE PODEMOS




 (Ya saben. Pablo 'Podemos' destila odio a España. Esto, por lo visto, es lo más progresista que usted se pueda imaginar. Si tiene la imaginación de 'Podemos'.)






PABLO ‘PODEMOS’ Y SU ODIO A ESPAÑA.


Nos cuenta ABC que en los JJOO de Pequín (2008), Pablo Iglesias publicó un artículo sobre lo que piensa de los símbolos españoles. Se llamaba 


La selección de baloncesto y la lucha de clases. El título ya es del siglo XIX, pero fíjense en el contenido:


- “Debemos solidarizarnos con los patriotas que no tienen equipo propio”, refiriéndose a los nacionalistas catalanes que piden selecciones catalanas.

Me revienta el nacionalismo español (mucho más que el vasco o el catalán, que le voy a hacer)”.


Sufrimos (…) soportando día tras día el nacionalismo español (por definición de derechas) y su bandera monárquica y postfranquista (…) Ya me gustaría a mí ver a los jugadores de la selección de basket con uniforme tricolor y escuchar un himno como La Marsellesa y no la cutre pachanga fachosa, antes de los partidos o cuando se gana algo”.


“Nuestra selección estatal (¿así suena bien?)”.


“Si te gusta el baloncesto y quieres emocionarte con un equipo que conoces (yo hasta que el baloncesto boliviano no llegue las olimpiadas paso de cambiar de equipo) te tienes que tragar la infame pompa nacional.


“El resultado final en el marcador en nada empaña estas enseñanzas revolucionarias. De hecho, nos ha librado de aguantar el himno.


“Lo que hemos visto hoy en Pekín ha sido una lección de leninismo (…) Los que nos reclamamos del marxismo, puestos a perder el tiempo con los deportes (como decía Javier Krahe, no todo va a ser follar)”.


Ya lo ven: el jefe de Podemos se ha quedado en la lucha de clases y repite los mantras nacionalistas con alegría.

Ahí está el “volem seleccions catalanes”, la demonización del “nacionalismo español” y la comprensión del nacionalismo catalán, el odio a la bandera española y al himno nacional, la manía republicana, el amor a la sangrienta La Marsellesa (“que una sangre impura abreve nuestras monturas”), el miedo a decir que España es una nación (mejor “Estado”, ¿verdad Pablo?), la admiración por dictaduras populistas tipo Bolivia, el amor a la momia de Lenin, la obsesión sexual… Cada vez parece más claro que Podemos no es el futuro de España, sino su pasado más cutre, casposo e ideológico.



Y lo que nos interesa más: hace unos días contábamos como una de las dirigentes de Podemos Cataluña, Gemma Galdón, hizo que despidieran a un chófer por llevar la bandera de España en la antena.


Hoy sabemos que el líder de Podemos se traga el discurso negrolegendario del autoodio a lo español, y comulga con el relato nacionalista del “Espanya dolenta, Catalunya bona”.


Doncs bon vent i barca nova, senyor Esglésies. Als dolços ens ha ben decebut.


(Dolca Cataluña)


 Encima, Pablo 'Podemos' y Arturo 'Braveheart. Cat' nos perjudicarán a todos,
 descarrilando la recuperación económica. Gracias, gracias.


Nouriel Roubini: "El efecto de Podemos y Cataluña descarrilarán la recuperación económica española"

Es profesor de Economía en la Universidad de Nueva York y presidente de la consultora RGE Monitor vaticina que los problemas resurgirán a mitad de 2015

Periodista Digital, 25 de enero de 2015.

3 comentarios:

Arcoiris dijo...

Yo trabajé en Munich en el 62, el año en que murió Marilyn, el año de la gran riada, el año de la gran nevada. Fui “Lager arbeiter” durante unos tres meses para pagarme la matrícula, como otros estíos había sido cargador de camiones y repartidor de cervezas, entre otros oficios de verano. Y recuerdo que, entonces, no me sentía especialmente orgulloso al significarme como español en aquel ambiente cosmopolita y que sentía celos cuando veía a otros, los lusos, por ejemplo, presumiendo de su condición. Como siento envidia cuando veo en las películas y documentales la veneración que los estadounidenses, por ejemplo, sienten por su nación y sus símbolos. Somos españoles. España es nuestra nación. Quizás algunos quieran mejorarla pero no puedo entender ni admitir que alguien se precie de odiarla o pretenda destruirla.

Sebastián Urbina dijo...

No solamente los lusos. En mis 22 ó 23 años de viajes por Europa, por motivos académicos, solamente he visto algunos españoles despreciar o ningunear a su patria. Los demás, todos orgullosos de la suya.

Pero también hay españoles que no se avergüenzan de ser lo que son. Afortunadamente.

Anónimo dijo...

Esos antiespañoles son unos ignorantes y les invitaría a leer un poco de historia, pero no la que le ponga su ideología delante de sus ojos, sino la verdadera, la contrastada, esdecir, que ellos mismo la comparen y se darán cuenta que estan en el pais con la historia más interesante del planeta, digna de sentir orgullo por España.